Portomarín: el alma gallega de Lavapiés desde 1982

  • La cocina gallega de interior es su punto fuerte
Video Player is loading.
Current Time 0:00
Duration 0:00
Loaded: 0%
Stream Type LIVE
Remaining Time 0:00
 
1x
    • Chapters
    • descriptions off, selected
    • subtitles off, selected
      Foto: REDACCIÓN |Vídeo: Telemadrid

      En el vibrante barrio de Lavapiés, donde las calles cuentan historias y las culturas se entrelazan, se encuentra un punto de reunión emblemático: el bar Portomarín. Desde su apertura en 1982, este establecimiento ha sido un refugio para los vecinos y visitantes, un lugar donde la esencia de Galicia se fusiona con la vida madrileña.

      Javier, la segunda generación al frente del bar, se esfuerza por mantener viva la tradición que su padre estableció hace más de cuatro décadas. "Aquí un poco confluye todo entre lo dramático nacional; son las calles, el cruce de la calle Argumosa con la calle Valencia, la plaza de Lavapiés. Es un poco el centro, yo diría, del barrio del pueblo", explica.

      Portomarín no siempre tuvo la apariencia que presenta hoy. Javier recuerda cómo en su inicio, "de la columna para allá era un banco", pero en 1986 tuvo la oportunidad de ampliar el espacio y transformarlo en lo que es hoy: un bar acogedor que celebra sus raíces gallegas.

      Doña Tomasa: un viaje gastronómico desde Cantabria hasta Madrid
      Doña Tomasa: un viaje gastronómico desde Cantabria hasta Madrid
      Doña Tomasa: un viaje gastronómico desde Cantabria hasta Madrid

      Doña Tomasa: un viaje gastronómico desde Cantabria hasta Madrid

      Lo que quiso el padre de Javier fue traer un trocito de su Galicia natal a Madrid. "Es un trocito de Portomarín, que es parte del Camino de Santiago, y recoger un poco de esa Galicia interior aquí en Lavapiés", añade.

      La cocina del Portomarín es otro pilar fundamental de su identidad. Luis, el chef que comanda los fogones, destaca su plato estrella: "El caldo gallego. También tenemos lacón a la gallega y pulpo gallego; a veces vendemos cien raciones en un sábado y diariamente utilizamos unos 40 kilos. Aquí vienen muchos gallegos que dicen que es mejor que en Galicia".

      La autenticidad es clave para Luis: "Los productos vienen casi todos de allí. Hacemos unas 15 o 16 tortillas españolas todos los días y tenemos la auténtica gallega, que lleva chorizo y lacón; esa la hacemos al momento".

      Las 'abuelas grafiteras' llenan de color y recuerdos Lavapiés en el Festival CALLE
      Las 'abuelas grafiteras' llenan de color y recuerdos Lavapiés en el Festival CALLE
      Las 'abuelas grafiteras' llenan de color y recuerdos Lavapiés en el Festival CALLE

      Las 'abuelas grafiteras' llenan de color y recuerdos Lavapiés en el Festival CALLE

      Este bar no solo es conocido por su comida; es también un lugar donde camareros, cocineros y clientes han forjado relaciones a lo largo de los años. Pepe, uno de los empleados más antiguos, comparte su experiencia: "Llevo aquí desde el año 86. El barrio ha cambiado muchísimo. Viene muchísima gente; Lavapiés es una zona muy concurrida. Viene mucha gente de fuera y siempre hemos tenido una clientela fiel y agradecida".

      Portomarín es un claro ejemplo de una comunidad vibrante, donde cada caña servida y cada ración compartida contribuyen a hacer barrio. En este rincón de Madrid, Galicia tiene aquí su principal embajada madrileña asegurada, convirtiéndolo en un verdadero símbolo del espíritu gallego en Lavapiés.

      Mejores Momentos

      Programas Completos

      Más de Gastronomía