Al menos dos organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico llevan dos años accediendo a datos privados de unos 130.000 agentes, principalmente de la Policía Nacional.
Todo empezó en el año 2022 cuando se produjo una brecha de seguridad, momento en el que, según las primeras investigaciones, un conocido y joven hacker español apodado 'Alcasec' pudo tener acceso a toda la información sensible de los policías afectado para luego vender todos esos datos a bandas criminales como los 'Miami' y los 'Niño Skin'.
Este trato comercial podría probarse gracias a la grabación de conversaciones telefónicas entre el hacker y los miembros de estas organizaciones.
Entre la información vendida no solo se encuentra datos profesionales de los agentes sino, también, datos personales como matrículas de vehículos privados, direcciones, números de teléfono y hasta DNIs.
A pesar del robo de datos, expertos en ciberseguridad como Juan Carlos Galindo, afirman que esta información no va a ser utilizada "para amenazar a los agentes" pero sí que lo emplean para tenerles identificados o para, incluso "cometer otras estafas".