Este viernes se reanudaba el juicio por el 'caso Candy' en Sevilla, pero en el último momento el juez ha suspendido la vista.
Se debería haber sentado en el banquillo la mujer que fue denunciada por presunta agresión por su maltratador, quien se cambió registralmente de sexo antes de ser condenado en firme a 15 meses de prisión, podrá enfrentarse a penas de cárcel a raíz de que esta causa concreta finalmente no vaya a ser tramitada como un enjuiciamiento rápido.
Después de que la persona denunciante, un hombre antes llamado Cándido y actualmente una mujer de nombre Candy, aportara un parte de lesiones, la Fiscalía ha pedido este jueves en el juicio previsto en el Juzgado de Instrucción 14 de Sevilla que las actuaciones se adecúen a lo que procesalmente se denominada 'diligencias previas'.
Esta petición de la Fiscalía, a la que se han adherido tanto la acusación como la defensa, conllevará que la causa por ese supuesto episodio de agresión de ella hacia su expareja (Candy) vuelva a un nuevo juzgado de instrucción y que, cuando concluya su investigación, la mujer denunciada sea enjuiciada por un Juzgado de lo Penal, por lo que podría entonces enfrentarse a una petición de pena de cárcel y no solo a una multa como hasta ahora.
En la breve vista que ha acogido este viernes el Juzgado de Instrucción 14 de Sevilla Candy ha mantenido su denuncia por la supuesta agresión ocurrida el pasado 9 de julio y ha ratificado además que sufrió lesiones.
A raíz del parte de lesiones sobre los hechos aportado por la parte denunciante en este caso, el fiscal ha planteado que las actuaciones se adecúen a las referidas diligencias previas, lo que ha implicado la inmediata suspensión del juicio rápido y que la causa vaya a ser repartida a un nuevo juzgado de instrucción, no como un delito de carácter 'leve' como hasta ahora.
A las puertas de los juzgados de Sevilla, el abogado de la mujer denunciada en este caso, José Antonio Sires, ha explicado que el "supuesto parte de lesiones", dado que entiende que Candy presentó una denuncia falsa contra su representada, podrá quedar "desvirtuado" en el correspondiente juicio que se derive de las nuevas diligencias.
Este letrado confía en que dicho juicio pueda celebrarse "lo más rápido posible" para que su representada pueda salir de esta "hecatombe". "Esto es, sin duda, nocivo para el estado anímico de la víctima, porque ya es la segunda vez que se suspende", ha indicado.
Candy está pendiente, a su vez, de otro juicio previsto en enero por supuestas agresiones reiteradas a su expareja por supuestas amenazas, injurias, vejaciones y quebrantamiento de condena.