Las relaciones están muy tensas entre el Real Madrid y el FC Barcelona desde que saltó el caso Negreira. El Real Madrid decidió presentarse como acusación particular y los mensajes del presidente azulgrana no han parado de acrecentar la tensión.
El último capítulo llega antes del clásico y, según apuntan varias fuentes, el Barcelona habría declinado acudir a la tradicional comida de directivas.
En su lugar habrá una merienda a partir de las ocho menos cuarto en el antepalco, costumbre que el Real Madrid ha establecido esta temporada antes de los partidos que disputa en el Bernabéu a las nueve.