En diciembre de 2020, la Comunidad de Madrid dio un paso decisivo frente a la crisis sanitaria provocada por el Covid-19 al inaugurar el Hospital Enfermera Isabel Zendal. Este centro médico fue levantado en un tiempo récord de apenas seis meses, desde que se anunció su construcción en mayo de ese año. Inmediatamente comenzó a funcionar y recibir pacientes contagiados. Ninguna otra región había logrado erigir un complejo de esta magnitud en tan poco tiempo.
Cinco años después del Estado de Alarma y el confinamiento, el Isabel Zendal se ha establecido como un referente nacional y el primer hospital de emergencias permanente en España. Sus tres amplios pabellones incluyen la emblemática zona cero, el área que acogió a los pacientes en los momentos más críticos de la pandemia. La Unidad de Cuidados Respiratorios Intermedios llegó a ser una de las más grandes de Europa.
Tras dar el alta al último paciente de Covid, el centro comenzó una nueva etapa. Actualmente, alberga la sede del Laboratorio Regional de Salud Pública y la sala del SUMMA 112.
Además, el Zendal ha dado un paso pionero al acoger el primer centro especializado en pacientes con ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica). Próximamente, incluirá un centro de rehabilitación para personas con daño cerebral adquirido y medular, tanto adultos como niños, junto con una unidad de hospitalización.
En 2026, el hospital dará otro salto adelante con la apertura de un instituto dedicado al estudio del Parkinson y el Alzheimer.
Todo esto manteniendo una característica única: su versatilidad. En tan solo 48 horas, el Isabel Zendal puede reconvertirse en un hospital de emergencia ante una nueva pandemia o catástrofe.