La ministra de Sanidad, Mónica García, ha señalado este viernes que las mascarillas son una de las recomendaciones que se barajan para afrontar la próxima temporada de virus respiratorios y ha confiado en "no tener que intervenir" como el año pasado porque está segura de que todas las comunidades cumplirán con ellas.
El Ministerio de Sanidad vigilará a las Comunidades autónomas para que no se produzcan colapsos en las urgencias por las enfermedades respiratorias del otoño. Los consejeros del PP aseguran que no es su competencia y echan en falta que se hable de temas principales como la falta de profesionales.
El detalle sobre el documento que están trabajando los técnicos con medidas comunes de actuación y prevención de los virus respiratorios se conocerá el próximo 17 de octubre, cuando está previsto que la Comisión de Salud Pública se reúna para cerrarlo, ha explicado García al término del Consejo Interterritorial.
Algo que ya se hizo anteriormente con la covid-19, y que ahora el Ministerio ha impulsado de manera pionera con la epidemia de gripe de este año "para que no nos pille el toro y no tengamos que tomar medidas" en pleno pico como ocurrió el año pasado, cuando Sanidad acabó imponiendo la mascarilla en los centros sanitarios en plena onda ascendente de casos.
Ha recordado, en este sentido, "las complicaciones" que tuvo para hacer efectiva en todo el territorio esta medida que en Sanidad consideran "básica". "Nosotros creemos que se puede actuar antes y que por eso necesitamos este documento", ha recalcado.
"Esperemos que se cumpla porque creo que no cabe pensar que un documento que se ha trabajado de manera conjunta no se cumpla; esperemos que nosotros desde el Ministerio no tengamos que intervenir", ha zanjado la ministra al ser preguntada por la posibilidad de que esas recomendaciones pudieran acabar siendo obligaciones en caso de incumplimiento.
Por su parte, la consejera de Sanidad madrileña, Fátima Matute, anunció que reclamaría al Ministerio que homologue los títulos de médicos y enfermeras extranjeros, "20.000 médicos al menos" y más de 3.000 enfermeras, entre ellos los cubanos, que están pendientes de homologar "en connivencia con el régimen castrista".
Madrid y otras comunidades insistirán en "abordar de una vez el Plan Nacional de Recursos Humanos, tan necesario por el problema estatal de falta de profesionales".
Matute reclamará asimismo que se agilice el acceso a los nuevos fármacos, tras un primer paso con el fármaco que trata el triple metastásico de mama, pero en el nuevo Real Decreto el ministerio "no incluye ni que se fijen precios ni que se disminuyan los trámites administrativos para que en España tengamos los fármacos antes que en Europa. Tardamos 900-1200 días y en Europa 180".
En cuanto a las listas de espera, ha criticado el "desconocimiento profundo" de la ministra Mónica García sobre el Real decreto, y ha defendido que en las listas madrileñas están "perfectamente especificadas todas las operaciones que se realizan por prioridad, las oncológicas, las que no son oncológicas", y que a la ministra "no le gusta que comunidades como Madrid tengan las menores listas".