Los tanques de tormentas han resultado fundamentales para evitar inundaciones en la capital. Solo en Madrid hay 36 gestinados por Canal de Isabel II con una capacidad equivalente a 391 piscinas olímpicas. Son también imprescindibles para impedir que la contaminación llegue a los ríos.
El tanque de Arroyofresno es el mayor de todos los de la red. De estas enormes piscinas de acumulación, el agua pasa a un gran colector y de ahí a la depuradora y una vez depurada acaba en el río Manzanares.
Se prevé la construcción de otros 100 tanques de tormenta en los próximos años.