En medio de las labores de retirada de lodo y de búsqueda de personas desaparecidas, se van conociendo situaciones increíbles que se vivieron en los peores momentos de la trágica riada que arrasó medio centenar de localidades valencianas.
Es el caso de un grupo de personas que se percató del riesgo que corrían en el parking subterráneo del centro comercial Bonaire, en el municipio de Aldaia. Una huida desesperada, agónica, la que vivieron varías trabajadoras del centro. Justo cuando comenzó la tromba de agua, se sintieron acorraladas, al darse cuenta de que sus coches estaban atrapados en el aparcamiento subterráneo.
Este martes se ha realizado una última batida en ese parking. Los efectivos han revisado alrededor de medio centenar de vehículos y a pesar del temor que había por la gran capacidad del aparcamiento, el pronóstico finalmente es positivo. Policía Nacional ha confirmado que siguen sin encontrar víctimas mortales.