Las calles de Madrid se convierten en un personaje más de esta fascinante intriga que nos tiene con los ojos muy abiertos y el corazón encogido.
Omar ha conseguido llegar a la capital huyendo de quienes le secuestraron y mataron ante sus ojos a su mejor amigo. Lo ha hecho con la ayuda de su madre, su novia Edurne, con la que ha podido reencontrarse, y el periodista Eche.
Precisamente el periodista es clave en este capítulo. Eche va a unir dos asuntos cruciales que, hasta ahora, la investigación no había conectado.
Además, el capítulo descubre traiciones que van a engendrar otras traiciones. La familia de Omar va a sufrir en su propia casa el miedo y el rechazo que provocan en amigos y vecinos. La jefa de la investigación, ahora apartada del caso, va a recibir una oferta que no se espera y cuyo alcance desconocemos.
Pero, algo pasa con Omar. El que, hasta ahora, ha sido el perfecto inocente en apuros, empieza a hacernos pensar que no es lo que parece sino todo lo contrario…