El piloto madrileño Jorge Nartín ha reconocido que en las últimas vueltas de la carrera ni siquiera era capaz de "pilotar" y que empezó a "llorar" de emoción, todo culminando un largo "camino" plagado de "altibajos y momentos duros" en los últimos años.
"Es increíble, no sé qué decir, estoy completamente en shock. Esto va dedicado a mi gente, a mi familia, a todas las personas que me han apoyado. Las últimas vueltas ni siquiera podía pilotar, empecé a llorar. Ha sido una carrera muy emotiva y quiero dar las gracias a toda mi gente, está dedicada totalmente a ellos", señaló tras proclamarse campeón.
Además, destacó el largo "camino" que ha tenido que recorrer hasta alzar el título.
"Han sido muchas lesiones, caídas, y al final llegamos aquí. Muchas gracias a todo el mundo. Esto va dedicado también a Valencia. Espero que continuemos mejorando y disfrutando del momento, que es lo más importante, vivir en el presente y disfrutar del momento", apuntó.
Posteriormente, en declaraciones a DAZN, resaltó los "muchos altibajos y muchos momentos duros" que ha atravesado. "No he tenido un camino fácil, todos sabemos de dónde vengo. Mis padres han peleado mucho para que yo pudiese cumplir mi sueño, y era este: ser campeón del mundo de MotoGP. No lo he tenido fácil, pero eso me ha hecho ser más fuerte; si no lo hubiera tenido complicado, quizá me hubiese rendido antes.
"Es el sueño de mi vida, podría parar mañana que sería ya la persona más feliz del mundo. Pero hay 'Martinator' para rato", indicó.