Casas de videoclip, casas con historia, casas con arte… y todas, repletas de recuerdos muy emotivos del pasado. Esta semana, en Toc, Toc… ¿Se Puede?
En el programa de hoy:
David Moreno se traslada hasta Colmenarejo para conocer una casa de serie, de película y de videoclip. La vivienda de Cristina Larrocha, es una construcción abierta a la naturaleza, donde la luz es protagonista. Su curiosa forma en uve le permite disponer de zonas acristaladas donde disfrutar en cualquier época del año de un café y hasta de un jacuzzi. Si el interior sorprende prepárate para ver el exterior con una piscina que parece diseñada por el mismísimo César Manrique.
Andrea Prat se adentra en una vivienda que antes fue una nave industrial en pleno centro de Madrid. Su anfitriona, Andrea Zarraluqui, ha hecho de este espacio un hogar acogedor, lleno de colores… y cómo no, de sus famosas vajillas. Más de 300 metros cuadrados donde las mesas, totalmente vestidas, son protagonistas. Decenas de muebles y objetos heredados encuentran aquí su sitio en armonía. El arte de la dueña llena cada espacio, como los bonitos dibujos de los azulejos de los baños con los que ha conseguido recrear un auténtico ambiente tropical.
Isabel Balado visita el hogar de Marina Cuesta. Una bonita casa en la conocida como colonia de los taxistas. Después de mucho buscar, la dueña ha encontrado aquí la casa soñada. Para acomodarla a su gusto, ha tenido que realizar una increíble reforma. El antiguo garaje es ahora una bonita cocina abierta al salón y los dos pisos de la vivienda los ha transformado en tres. El carácter romántico de Marina y el espíritu práctico de su marido alemán, conviven en esta casa con armonía. Para completar la vivienda, un bonito jardín donde se pueden escuchar hasta los pájaros en pleno Madrid.
Un hogar con alma en Madrid: Dos casas unidas por la memoria familiar y una viga hormigón
Y Estefanía Masó se traslada a Colmenar de Oreja a la casa familiar de José Freire. Una vivienda llena de recuerdos de la infancia del dueño. Con él viajaremos al pasado, descubriendo cómo eran las típicas casas de las familias adineradas de Colmenar donde no faltan las famosas bodegas subterráneas llenas de enormes tinajas. Un hogar tan genuino como José y que guarda un increíble secreto: una enorme biblioteca.
Cuatro hogares muy diferentes, pero con un punto en común, transmiten en cada rincón la personalidad de su dueño. Hoy, en Toc, Toc… ¿Se Puede?
