Pavos reales cruzando la carretera y paseando a sus anchas por las calles del barrio de Fuente del Berro. Es la situación que viven a diario los vecinos como Carmen, que pastorea a estos animales que deberían estar en el parque para evitar accidentes.
Una realidad es que pavos ha habido siempre en Fuente del Berro, en el parque que da nombre al barrio, pero ahora la situación se ha vuelto insostenible.
"La primera razón, los atropellos, que están muriendo a diario. En segundo lugar, las molestias a los vecinos, que hay muchísimas. Y luego que provocan accidentes, ese sería el tercer caso", declara Carmen.
Todos los días salvando pavos. "Ellos están súper felices y a mí me da un poco de pena esto porque la verdad que los pobres pavos no tienen la culpa. A mí me parece inexplicable que tengan un parque y se salgan a las aceras a comerse las colillas", nos cuenta otro vecino.
"Yo creo que la principal solución que podemos poner a esto es que los pavos estos, que ya están resabidos, que viven en la calle, se los lleven a un sitio más seguro, como puede ser El Retiro o el recinto de Juan Carlos I", afirma Carmen.
"Cuando ellos ya saben que ahí tienen comida, pues ya luego estarán por el parque, que es donde tienen que estar", añade. Una situación que dicen viene de la pandemia, momento que no había nadie en las calles. Sea cual sea la solución, los vecinos quieren que llegue rápido.