Alexia, Codina y Paredes confirman los intentos de Rubiales para que Hermoso dijese que consintió el beso
- Alexia explica que en un principio pensó que el beso de Rubiales a Hermoso era "un malentendido", algo "fortuito"
- Ana Ecube, amiga de Hermoso, asegura que Luque le dijo que no les faltaría trabajo si ayudaban a Rubiales
Las compañeras de Jenni Hermoso, Laia Codina e Irene Paredes se sorprendieron al conocer el beso. Irene Paredes explicó en su declaración que fue la última en llegar al vestuario y Jenni estaba contando lo que pasó, ante lo que le dijo "eso no está bien".
Confirmó que en el autobús se hicieron bromas sobre el beso y es "cuando les digo que paren porque puede ser algo muy grave". "No creía que era un tema con el que hacer bromas".
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Jenni quería compartir con sus compañeras que el beso no fue consentido. Poco a poco, las futbolistas fueron entendiendo la situación. Laia Codina ha recordado que en el autobús al aeropuerto vio a Hermoso "asimilando lo que le había pasado, que sabia que era algo grave, pero que no lo había procesado aún".
Alexia Putellas e Irene Paredes confirman las presiones a Jenni en el avión: ha señalado que ella, cuando le comentó que le había propinado un beso en la boca, le quitó importancia pensando que "era algo fortuito": "En la euforia le digo '¡anda calla!', pero su cara era un poco rara".
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Ya en el autobús, Putellas ha recordado que Hermoso le dijo "'tía, es que es muy fuerte'". "(En el autobús) se empieza a hacer comentarios del beso, y ahí pienso que (quizá) hubieran encajado en el mismo lado (al besarse en la entrega de medallas) y que era un hecho fortuito", ha explicado Alexia.
Rubiales quería a toda costa que Jenni grabara un video con él. Tras su negativa lo intentó con la capitana. Una situación de agobio que siguió creciendo en el viaje a Ibiza.
Laia Codina ha relatado dos momentos que vivió con Jenni Hermoso en Ibiza, donde la Fiscalía también encuadra las coacciones de las que acusa a los otros tres implicados: Vilda, el exjefe de marketing de la Federación Rubén Rivera, y el exdirector de la Selección masculina Albert Luque.
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En aquel viaje es donde ella vio "peor" a Jenni Hermoso, porque ya "lo había asimilado" y estaba "triste y cansada". "Fueron constantes veces las que fueron a hablar con Jenni", ha señalado.
En la isla, no terminan las presiones. Aquí aparece las figuras de otros dos procesados en la causa, Rubén Rivera y Albert Luque.
