El sonado desencuentro de Donald Trump y Volodímir Zelenski en el Despacho Oval ha tenido una cara B, ya sin la presencia de las cámaras, en las dependencias de la Casa Blanca. Ambos líderes y sus respectivos equipos han tratado de reconducir la cita, pero sin éxito, dijo a EFE un alto funcionario estadounidense.
Cuando las cámaras de televisión abandonaron el Despacho Oval, Zelenski y su delegación se dirigieron a otra sala, mientras que Trump se reunió con sus asesores.
En conversación con su equipo, el presidente decidió que Zelenski "no estaba preparado para negociar" y que las conversaciones "no serían productivas", según la misma fuente.
Entonces, Trump publicó en su red social Truth Social un mensaje en el que anunciaba que no negociaría con Zelenski, le recriminaba haber "faltado al respeto" a Estados Unidos y le decía que podría volver a Estados Unidos cuando "esté listo para la paz".
Poco después de esa publicación en Truth Social, el secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, y el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mark Walz, informaron al presidente ucraniano de que debía abandonar el edificio y que las negociaciones quedaban suspendidas por el momento.
Según la versión estadounidense, Zelenski se encontraba en otra sala cuando Trump publicó su mensaje en Truth Social anunciando que no negociaría con él y cuando los asesores estadounidenses le pidieron que se fuera.
Habitualmente, cuando un encuentro entre el presidente de EE.UU. y un líder extranjero incluye un almuerzo de trabajo, la delegación visitante se retira a otra sala tras la reunión en el Despacho Oval y ambas partes se reencuentran más tarde para la comida.
Sin embargo, tras la decisión de Trump, se canceló ese almuerzo y la delegación ucraniana tuvo que abandonar la Casa Blanca mientras el almuerzo ya preparado estaba en unas bandejas en un pasillo junto a la oficina de prensa.
Se esperaba que este viernes ambos mandatarios firmaran un acuerdo por el que Ucrania compartiría el 50% de los ingresos derivados de la explotación de sus recursos naturales.
Sin embargo, tras el enfrentamiento dialéctico entre los dos líderes, el documento se quedó sin firmar, según indicó a la prensa una fuente de la Casa Blanca.