Podemos nació hace algo más de una década como una formación que entre sus postulados más firmes incluía la defensa de los derechos de las mujeres. Sus lideres han agitado el feminismo como una de sus principales banderas, aunque desde sus inicios ya entre los círculos de mujeres se escuchaban soterradas las denuncias por posibles agresiones sexuales y actitudes machistas en la formación liderada por Pablo Iglesias. Denuncias que han cobrado mas credibilidad con casos como los de Íñigo Errejón y Juan Carlos Monedero.
En sus inicios los fundadores de Podemos prometían cambiar la política y entre los cambios, Monedero, Iglesias o Errejón hablaban de empoderar a las mujeres.
Ya en 2016, militantes de Podemos Madrid denunciaron acosos sexuales en las bases, y se empezó a denunciar actitudes de machismo en la cúpula de la formación.
Clara Serra, responsable de Igualdad de la formación morada hablaba de que "no le sobraba testosterona" a Pablo Iglesias sino a todo Podemos.
Había saltado la polémica por el comentario de Pablo Iglesias sobre lo azotes a Marilo Montero "hasta hacerla sangrar" por el que tuvo que disculparse.
De machista también se le tachó por quedarse con la tarjeta del móvil de su asesora Dina Boseelham.
Pero la sorpresa mayúscula llegó hace cuatro meses con la dimisión de Juan Carlos Errejón por denuncias de acoso sexual, él que siempre defendió que no había denuncias falsas.
Ahora con Juan Carlos Monedero, también asegura ser víctima, según dice, de falsas denuncias.