La borrasca Jana ha caído con fuerza, dejando precipitaciones intensas en seis comunidades autónomas: Andalucía, Baleares, Castilla y León, Extremadura, Murcia y Canarias.
En Málaga, la situación es especialmente crítica. El río Vélez se ha desbordado, complicando las labores de los bomberos, mientras que en Ronda el río Guadalevín baja con una fuerza inusitada. Las fuertes precipitaciones han provocado el cierre de la carretera que conecta con San Pedro de Alcántara debido a desprendimientos de rocas.
En Cártama, el río Guadalorce alcanzó los cuatro metros de altura, inundando huertas y zonas recreativas. En el casco histórico de Marbella, un edificio colapsó bajo las lluvias torrenciales, dejando una imagen de destrucción total.
En Cádiz, el temporal puso en peligro la vida de cinco barranquistas, quienes fueron rescatados uno a uno por la Guardia Civil mediante cuerdas. En Sevilla, el río Guadiamar muestra su lado más feroz, con un caudal que roza los 500 litros por metro cuadrado y amenaza con llegar a Doñana. Los pantanos, algunos con caudales triplicados, están siendo desembalsados para evitar desbordamientos mayores.
Más al norte, en Cataluña, el pantano de Sau comienza a llenarse, acercando el agua a su icónica iglesia. El río Llobregat y el Ter, este último en la provincia de Girona, bajan con una potencia que ha dejado imágenes impactantes.
En Castilla y León, la crecida del río Adaja inundó calles de Ávila, mientras que en Segovia el Eresma sigue aumentando su caudal de forma preocupante.
Las autoridades mantienen la vigilancia sobre los ríos y pantanos, instando a la población a extremar las precauciones ante un temporal que no da tregua.