El documental de Luis Enrique sigue dejando algunos momentos icónicos e importantes del entrenador. Uno de esos momentos más duros que tuvo que atravesar el ex seleccionador fue la pérdida de su hija de 9 años, Xana.
En agosto de 2019, y tras cinco meses de lucha, la hija menor del ex entrenador del Barça falleció a causa de un osteosarcoma, un tipo de cáncer que afecta a los huesos.
El asturiano sorprende con sus declaraciones sobre si se considera afortunado o desgraciado ante lo vivido: “Mi hija vino a vivir con nosotros nueve años maravillosos. Yo me considero afortunado. Muy afortunado. Tenemos mil recuerdos de ella. Vídeos, cosas increíbles... "Mi madre no podía tener fotos de Xana, hasta que llegué a casa y le dije... ¿por qué no hay ninguna foto de Xana, mamá? ‘No puedo, no puedo’. Mamá, tienes que poner a Xana".
Aunque el adiós de Xana ha sido el peor momento en la vida del asturiano y de su mujer Elena Cullell, para el entrenador de fútbol su hija está más presente que nunca: "Xana está viva. En el plano físico no está, pero en el plano espiritual está porque cada día hablamos de ella y nos reímos y recordamos. Yo pienso que Xana todavía nos ve. ¿Cómo quiero que Xana piense que vivimos esto?".