Estamos en otoño y en los últimos días las lluvias en nuestra región han propiciado que hongos y setas proliferen en los bosques y campos madrileños. Pero para practicar la recogida de este manjar culinario es necesario tener conocimientos sobre micología, sobre las variedades que existen.
En esta ocasión nos hemos acercado hasta el municipio de Cercedilla, al norte de la Comunidad de Madrid y hemos salido al campo acompañados de Isabel Pérez, una experta micóloga que nos ha explicado qué precauciones debemos tomar y qué debemos saber para que salir a por setas sea seguro y respetuoso con el medio ambiente.
La recolección de estos hongos debe realizarse con extrema cautela, ya que algunas especies pueden confundirse con hongos tóxicos potencialmente mortales.
RECOMENDACIONES Y LIMITACIONES EN LA RECOLECCIÓN DE SETAS
Nada de bolsas de plástico. En su lugar una cesta de mimbre o similar, que permita la difusión de las esporas.
Usa un cuchillo o navaja para cortar las setas. El uso de rastrillos está prohibido, ya que dañan tanto la capa vegetal superficial como el micelio del hongo.
Recolecta sólo la cantidad que vayas a consumir, las setas son muy perecederas, y nunca superes la cantidad máxima permitida.
Cuando recolectes la seta, tapa el agujero originado para proteger el micelio, permitiendo que vuelva a crecer en la próxima estación.
Respeta los ejemplares pasados, inmaduros o no comestibles, ya que todos tienen su valor dentro del ecosistema.
Nunca recolectes ni consumas setas no identificadas.
Recolecta solo durante las horas de luz para minimizar el impacto sobre el bosque y sus habitantes.
No olvides llevar contigo un documento acreditativo de tu identidad personal y el permiso de recolección correspondiente.
PNSG