La mujer asesinada en Benalmádena (Málaga), presuntamente a manos de su marido y en presencia de sus hijos, presentó en enero por primera vez una denuncia contra él y pidió una medida de alejamiento, pero la juez no la adoptó porque consideró que no se daban los presupuestos exigidos en la Ley.
La víctima presentó la denuncia el pasado 21 de enero y relató haber sufrido amenazas, coacciones y vejaciones leves por parte de su presunto agresor, pero aseguró que no había sido maltratada físicamente, que únicamente le levantó la mano sin llegar a golpearla, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
La denuncia se interpuso en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 3 de Málaga y el procedimiento derivó en un juicio rápido señalado en el Juzgado de lo Penal número 12 de esta capital.
El juzgado denegó la orden de alejamiento en base a la valoración de riesgo recogida en el fichero VioGén, que consideró que el caso revestía un riesgo medio, según las fuentes.
Los hechos denunciados por la víctima fueron considerados constitutivos de los delitos de amenazas, coacciones y de un delito leve de vejaciones.
La entidad del caso no requirió la apertura de diligencias previas o de un proceso sumarial y por ello se tramitó como un juicio rápido, han añadido las fuentes.
La mujer, Lina, de 48 años, llevaba un mes en el sistema VioGén pero no contaba con medidas de protección porque su caso estaba inactivo.
El arrestado, de 42 años, fue quien alertó este domingo, sobre las cinco de la madrugada, del incendio en su vivienda, pero cuando llegó la Policía lo encontró junto a los hijos fuera del inmueble y a ella dentro, fallecida y con signos de violencia.
Tras sofocar las llamas, los policías hallaron dentro de la vivienda a la víctima, con posibles signos de haber sido golpeada y estrangulada, aunque será la autopsia la que determine las causas de la muerte.
La fallecida y el presunto autor de su muerte mantenían una relación matrimonial desde hacía 11 años y habían tenido tres hijos, todos menores de edad. La mujer tenía un cuarto hijo nacido en 2006 de una relación anterior.
El subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, ha informado de que la Policía Científica está recabando pruebas en el domicilio para determinar cómo han ocurrido los hechos.
Ha explicado que ella no denunció violencia machista y que fue ante algún altercado en enero cuando un familiar llamó a la Policía Local de Benalmádena, que se personó en la vivienda el 20 de enero. Al día siguiente se presentó la mujer en el juzgado y pidió la orden de alejamiento.
El juzgado, ante las pruebas que existían en ese momento y "alguna posible contradicción" de la víctima no determinó esa gravedad, según el subdelegado, quien ha abogado por seguir trabajando para mejorar el sistema VioGén y para que se conciencie a la sociedad y a las víctimas de la importancia de denunciar.