El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró este viernes en Roma que "no va a haber impunidad" por el caso Koldo y apuntó que será la Justicia la que lo dirima, antes de reconocer que fue informado del viaje de la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez a Madrid, alegando que era "privado".
"A diferencia de lo que ha ocurrido en épocas pasadas, con mi Gobierno si hay algún caso de corrupción tendrá que ser la justicia y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado quien lo determine, no va a haber impunidad. Quien la haga, la paga", dijo en una rueda de prensa en la Academia de España de Roma, tras reunirse con el papa.
"Quiero trasladar a la ciudadanía que lo más importante en esa actuación es responder de forma determinada, colaborar con la Justicia, ser transparente por parte de un Gobierno limpio que no tiene nada que ver con esas practicas faltas de ejemplaridad y rayanas con la corrupción (del pasado) y también que no va a haber impunidad", añadió.
Sánchez reaccionaba así un día después de que trascendiera un informe remitido por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil al juez que investiga el caso Koldo en la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, con nuevas revelaciones sobre la presunta trama.
El documento plantea investigar al exministro de Transportes y actual diputado José Luis Ábalos por los indicios existentes de su "papel relevante y de responsabilidad" en la trama.
Y apuntaba que el presunto conseguidor, Víctor de Aldama, se había valido de su relación con él y con su asesor, Koldo García, para "influir" en la concesión del rescate de la aerolínea Air Europa.
El presidente del Gobierno, aunque llamó a respetar la presunción de inocencia, recordó que pidieron el acta a Ábalos y abrieron un expediente de expulsión del Partido Socialista.
Asimismo, la UCO sostiene en su informe que Ábalos informó a Pedro Sánchez de que iba a reunirse con la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, a pesar de que esta tenía prohibido entrar en la Unión Europea (UE). El documento incluye la captura de pantalla de una conversación con un mensaje enviado supuestamente por Ábalos al jefe del Ejecutivo.
Pedro Sánchez reconoció que el exministro Ábalos le informó de esta visita pero que fue cancelada al constatar que sobre Rodríguez pesaban "sanciones individuales".
"En relación con el viaje, o mejor dicho el 'no viaje' de la vicepresidenta de Venezuela a España, la participación del Gobierno de España y la mía en particular sobre esta cuestión es la siguiente: las visitas privadas y oficiales de vicepresidentes del Gobierno o de ministros y ministras de múltiples gobiernos del extranjero son muy cotidianas y asiduas.
Y agregó: "A mi efectivamente el exministro Ábalos me informó de esta visita privada de la vicepresidenta Delcy Rodríguez a España y cuando el Gobierno de España se percató de que había unas sanciones individuales a la vicepresidenta de Venezuela efectivamente se canceló esa visita".
Por lo tanto, dijo, "cualquier otra visión que tenga que ver con supuestas prácticas delictivas tendrán que ser las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y la justicia quien lo dirima y tendrán que responder aquellas personas involucradas". El Gobierno de España, subrayó, "actuó" al constatar la sanciones.
Según la UCO, el exministro Abalos informaba a Sánchez de que llegaría la vicepresidenta venezolana "en privado", y que mantendría una reunión discreta para hablar sobre la relación de empresas españolas con el régimen chavista.
El presidente le contesta "BIEN". Daba así su visto bueno a esa reunión con la mano derecha de Maduro a pesar de que tenía prohibido pisar suelo europeo.
El presidente del Gobierno respondió en 2020 en Congreso y Senado, y en ambas ocasiones aseguró que Ábalos fue al aeropuerto de Barajas para evitar que la vicepresidenta venezolana pisara suelo español.