Este fin de semana los reyes de España rendían homenaje a los compatriotas asesinados por los nazis en el campo de concentración de Mathausen.
Fue un acto emotivo, con Felipe VI al frente de la delegación que rindió honores a los casi 5.000 españoles muertos en este centro de trabajos forzados y exterminio austriaco durante la Segunda Guerra Mundial.
Semanas antes de este acto por el 80 anivesario de la liberación de Mathausen-Gusen, en dos localidades de la Comunidad de Madrid se rechazaba la instalación de los denominados adoquines-homenaje o 'stolpersteine' que recuerdan a los deportados y asesinados por el regimen nazi.
Primitivo García y Pedro Baltanas, vecinos de Collado Villaba, lucharon primero en la Guerra Civil y luego contra Hitler. Deportados a Mathausen fueron asesinados.
Valentín Barroso, vecino de Alpedrete, también se ha quedado sin su homenaje. Como García y Baltanas combatió en elbando aliado contra el nazismo y corrió la misma suerte en Mathausen.
En ambas localidades, PP y Vox se han opuesto a estos reconocimientos que en la mayoría de las localidades madrileñas en las que se ha planteado han sido respaldados, en ayuntamientos de todo signo político.
En España se ha colocado más de medio millar de adoquines del recuerdo en lo que figura el nombre, el lugar de camiento y las circunstancias en las que fieron asesinadas estas personas.