La línea 6 de Metro de Madrid, conocida como 'la circular' pasará a convertirse en la primera línea con conducción automatizada, sin conductor, del suburbano madrileño.
Para ello se llevará a cabo un renovación integral de la línea, que contará con nueva superestructura de vía, nueva señalización y nuevas comunicaciones,
En un primer momento, las obras provocarán el cierre en el arco oeste de la línea, entre Moncloa y Méndez Álvaro (ambas estaciones estarán disponibles para operar como cabeceras del tramo abierto), desde el sábado 31 de mayo hasta el 12 de septiembre, según apuntan desde Metro.
En una segunda fase se actuará en el arco este, entre Moncloa y Legazpi, con la suspensión del servicio en este tramo entre el 13 de septiembre y el 31 de diciembre.
Por su parte, la estación de Arganda-Planetario, la última de la línea en abrir --el 26 de enero de 2007--, permanecerá cerrada durante todo el tiempo, ya que ejercerá como centro de coordinación de las labores (es la única que cuenta con rampa para que pueda acceder toda la maquinaria necesaria para los trabajos).
Para los trabajos, con una duración de siete meses, se ha teniendo en cuenta el periodo de menor demanda --verano-- y se ha intentando armonizarlos con la llegada de los nuevos 40 trenes de Metro que ya está fabricando la empresa CAF para que circulen por esta línea en 2027, además de compatibilizarlo también en cuanto a inversión, ya que el 83% de las acciones ya estaban contempladas.
Servicios de autobús gratuitos
El cierre de esta línea, la más utilizada con 430.000 viajeros diarios, con 28 estaciones a lo largo de casi 23,5 kilómetros y conexiones con el resto de líneas del suburbano, la red de Cercanías y los principales intercambiadores de autobuses, supone un reto en cuanto a la movilidad, siendo además la más usada, con más de 116 millones de usuarios en 2024.
Para afrontarlo, durante el tiempo que duren las obras se establecerá un plan de transporte alternativo para facilitar los desplazamientos.
Así, habrá un servicio sustitutivo de autobuses gratuito de la Empresa Municipal de Transporte (EMT), que cubrirá en superficie el intervalo afectado.
En concreto, en esta primera fase, será de Ciudad Universitaria a Méndez Álvaro, con parada en Usera (zona comercial de la calle Marcelo Usera).
De forma paralela, habrá lanzaderas que unirán Batán con Lucero, por un lado, y Legazpi con Plaza Elíptica, por otro.
Igualmente, la línea 180 de la EMT ampliará su recorrido y horario desde Legazpi a Arganzuela-Planetario y también tendrá carácter gratuito.
También se habilitarán aparcamientos disuasorios.
En cualquier caso, este plan es provisional y está vivo, de modo que se irá adaptando a las necesidades de movilidad, fundamentalmente en cuanto a la segunda fase de los trabajos.
La compañía metropolitana ha desarrollado además un planificador inteligente que ofrecerá las mejores opciones para conectar un punto de origen con uno de destino, y que estará disponible para su consulta a través de códigos QR en las paradas de los autobuses sustitutivos.
Los trabajos en la L6 ya han arrancado con actuaciones nocturnas que han obligado a adelantar la finalización del servicio a medianoche, una medida que se prolongará hasta que el día 1 de enero de 2026 'la Circular' reabra por completo.
Renovación integral de 'la Circular'
Con estas obras la L6 de Metro se convertirá en 2027 en la primera línea con conducción automática de toda la red del suburbano.
De esta forma, el Gobierno regional arranca la renovación integral de la Circular, lo que permitirá aumentar la capacidad de transporte de la infraestructura más demandada por los madrileños, con más de 116 millones de usuarios en 2024 y una media de 400.000 diarios.
Con un presupuesto superior a los 800 millones de euros, las actuaciones para la automatización de la línea conllevan el acondicionamiento de la plataforma de vía, la instalación de las puertas de andén, la llegada de los 40 nuevos trenes recientemente adquiridos y la actualización de la señalización y comunicaciones para que estos puedan circular por ella.
Estas actuaciones permitirán que en 2027 comiencen a circular por esta línea los 40 trenes de conducción semiautomática, sin cabina de conductor., que permitirán una frecuencia de paso de dos minutos, incrementar la velocidad un 33% y aumentar la capacidad un 17%, al pasar de los 1.200 pasajeros actuales hasta los 1.385.
De esta forma, desde Metro han resaltado que se aumentará la capacidad, ya que con un tren cada dos minutos se incrementará hasta un 70% la capacidad de la línea en hora punta; se ofrecerá mayor fiabilidad, ya que la renovación de la plataforma de las vías reducirá de forma drástica las incidencias; habrá mayor flexibilidad al poder inyectar o retirar trenes según la demanda y necesidades; y se mejorará la eficiencia gracias a un sistema automático programado.