El Ejército israelí ataca el corazón militar de Hamás en Gaza y mata 50 terroristas
Destruye una amplia red de túneles subterráneos, fábricas para la producción de misiles antitanques y puestos de lanzamientos de cohetes
Redacción / Efe
El Ejército israelí aseguró que mató a unos 50 terroristas palestinos estos últimos días de combates en la ciudad de Gaza, donde dicen haber atacado el corazón militar del grupo islamista Hamás, cerca del Hospital al Shifa, el principal centro médico de la Franja.
La portavocía militar anunció que "fuerzas de infantería, blindados e ingenieros de combate" atacaron una zona militar de los terroristas de Hamás en el centro de la ciudad de Gaza con el apoyo de la Fuerza Aérea y unidades de élite.
Durante los combates en la zona en los últimos días, agregó el comunicado militar, las fuerzas israelíes "eliminaron a unos 50 terroristas" y destruyeron "infraestructura terrorista, incluyendo una amplia red de túneles subterráneos", fábricas para la producción de misiles antitanques y puestos de lanzamientos de cohetes.
Este área militar, explicó el Ejército, "es el corazón de las actividades operativas y de inteligencia de la organización terrorista Hamás y se utilizó, entre otras cosas, para planificar y preparar a los agentes de Hamás para el ataque asesino del 7 de octubre".
La zona albergaría además "la sede central de inteligencia y el cuartel general del aparato aéreo" de Hamás, centros de entrenamiento militar y oficinas gubernamentales del grupo, incluyendo el Ministerio de Interior.
"Todas las infraestructuras terroristas mencionadas anteriormente están muy cerca de instalaciones civiles como escuelas, guarderías, clínicas médicas y mezquitas. Esta es una prueba más de que la organización terrorista utiliza a los residentes de la Franja de Gaza como escudo humano para sus asesinas actividades terroristas", denunció el Ejército israelí, que destacó que los combates en el área continúan este jueves.
Israel declaró la guerra a Hamás el 7 de octubre tras un ataque del grupo islamista que incluyó el lanzamiento de cohetes y la infiltración de unos 3.000 milicianos que masacraron a unas 1.400 personas -la mayoría civiles- y secuestraron a más de 240 en las aldeas israelíes cercanas a Gaza.
Desde entonces, el Ejército de Israel ha respondido con cotidianos y contundentes bombardeos sobre la Franja de Gaza y una incursión terrestre sin precedentes en los últimos años, que ha dejado más de 10.800 palestinos muertos, casi 27.000 heridos y al menos 2.500 desaparecidos, la gran mayoría civiles, en medio de una terrible crisis humanitaria.