Cáscaras de limón, de calabacín, de kiwi… todo resto orgánico es bueno para realizar compost.
Este producto se obtiene a partir de distintos materiales orgánicos, los cuales pasan por un proceso biológico de descomposición.
Sin embargo, en Montejo de la Sierra no elaboran cualquier tipo de compostaje, producen: avicompostaje.
Aves y compost
Los ciudadanos de este municipio dan sus residuos orgánicos para que las gallinas los ingieran.
Los restos que las aves dejan sumado a sus excrementos son los productos necesarios para el avicompostaje.
Mezclar y airear esta mezcla es fundamental para que las bacterias hagan su trabajo y se descomponga cada vez más rápido.
Uno de los símbolos de que el compost está bien hecho es cuando aparecen lombrices. Estas aceleran el proceso, ingieren los nutrientes de la mezcla.