La Federación de Tenis de Madrid organizó un emotivo homenaje institucional y popular al que fuera su presidente en el tránsito del siglo XX al XXI, Joaquín Molpeceres.
El acto aconteció en el Club de Campo Villa de Madrid, con motivo de la celebración del torneo internacional femenino ITF W100 Villa de Madrid.
La FTM preparó un tributo por fases, del pasado al presente y futuro, iniciándose la entrega de galardones por una raqueta Dunlop Maxply de madera, con su funda y prensa originales, para vincular la época de Molpeceres como amante y practicante del tenis en el Club de Tenis Chamartín, a las órdenes del gran Antonio Martínez (quien no pudo asistir al acto por indisposición).
En el Club de Campo Villa de Madrid con motivo del ITF W100 capitalino
El segundo motivo de reconocimiento se concentraba en un collage con destacados reportes de prensa de la espléndida inauguración de la sede central de la FTM, de finales de junio de 1988; lo que podría considerarse obra esencial del mandato de Molpeceres al frente de la Federación de Tenis de Madrid, y que fue inaugurada junto al entonces alcalde de Madrid Juan Barranco, quien muy a pesar tuvo que ausentarse.
El cuadro lo entregó Juan Bautista Avendaño, gerente de la FTM, que pidió que le acompañaran otros dos grandes extenistas, José Edison Mandarino y Pepe López Maeso.
A continuación, Carlos Rodríguez, vicepresidente de la FTM, puso en manos de Joaquín una réplica a escala del cartel con la imagen del propio homenajeado, que pasa a formar parte del salón de la fama del tenis de Madrid, junto a históricos tenistas y entrenadores de nuestra región.
