El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participó este viernes en el acto institucional del Ejecutivo por el 8 de marzo asegurando que España es "un referente global del feminismo". Sin embargo, el Gobierno y sus socios de la izquierda llegan a este 8-M salpicados por los escándalos sexuales que chocan frontalmente con el espíritu del Día de la Mujer.
Las denuncias de mujeres contra Juan Carlos Monedero o Íñigo Errejón impactan en la imagen de Sumar y Podemos, acusados de silenciar durante mucho tiempo esas presuntas agresiones sexuales. Pedro Sánchez también se ha visto perjudicado por los escándalos protagonizados por el que fue su mano derecha, José Luis Ábalos, señalado por colocar y mantener con dinero público a sus amantes, alguna de ellas con pasado en la prostitución.
Así las cosas, la izquierda tiene muy difícil abanderar este año el 8-M. Las tres figuras mencionadas embarran, y en cierta medida desacreditan, el feminismo de PSOE, Podemos y Sumar.
Jéssica, Claudia, Andrea y Nicole... La lista de mujeres que fueron colocadas en empresas públicas por Koldo García y José Luis Ábalos no para de crecer. Mucho tendrá que explicar Ábalos sobre estas chicas y sobre la contratación de prostitutas a cargo del erario público.
Por su parte, Errejón fue referente feminista de Sumar. Ya en 2016, en su primer partido, las feministas de Podemos le eligieron como icono para los carteles del 8-M. Ahora está denunciado por abuso sexual.
Misma situación en la que se encuentra Juan Carlos Monedero, habitual en las manifestaciones del 8-M.
Además, tanto en el caso de Errejón como el de Monedero hay sospechas de que sus conductas se conocían en sus formaciones políticas y que fueron tapadas por sus dirigentes.