¿Recuerdas lo que podías y no podías hacer durante el confinamiento de 2020?

  • Limitaciones de movilidad, restricción de visitas y alguna excepción por productos de primera necesidad o emergencias... Así fue el confinamiento durante el estado de alarma
Restricciones estado de alarma
Restricciones estado de alarma |Europa Press

Hace cinco años, el 14 de marzo de 2020, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, declaró el estado de alarma en todo el territorio español por la extensión de contagios Covid.

A partir de aquel momento, la vida de todos los españoles cambió por completo. La pandemia llegó a nuestras vidas y lo puso todo patas arriba.

A continuación, recordaremos qué actividades estaban permitidas y cuáles no durante el confinamiento.

Limitaciones de movilidad

La aprobación del estado de alarma privó a los españoles de salir de casa salvo por necesidades básicas o de urgencia.

Así pues, solo se podía circular por las vías de uso público de manera individual únicamente para adquirir productos de primera necesidad o medicinas.

¿Qué es el estado de alarma?
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Asimismo, cabía la posibilidad de acudir a centros sanitarios y al trabajo (en caso de que la empresa no hubiese podido establecer medidas de teletrabajo).

El ocio, por tanto, quedó completamente paralizado.

Restricción de visitas y transporte

Cualquier visita, que no fuese de asistencia o cuidado a ancianos o personas dependientes, estaba terminantemente prohibida.

Tanto para este tipo de asistencias estrictamente necesarias, como para las actividad permitidas mencionadas anteriormente, los ciudadanos podían moverse en coche o transporte público.

Las claves que debías conocer del estado de alarma
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No obstante, debía tenerse en cuenta que la oferta de servicios ferroviarios, terrestres, aéreos y marítimos quedaba reducida a la mitad.

Además, en los autobuses no podía ocuparse las filas posteriores al conductor para respetar la distancia de seguridad recomendada por las autoridades sanitarias.

Las mascotas, el salvoconducto para salir a la calle

En aquellos momentos en los que el miedo y la preocupación por la pandemia hacían que la gente evitase al máximo pisar la calle, quienes tuvieran mascotas tenían la posibilidad de bajar para que pudiesen hacer sus necesidades y gozar de la "libertad" que requieren.

Eso sí, el tiempo de estancia en el exterior era muy limitado. Asimismo, las tiendas de alimentos para animales de compañía también tenían permitida su apertura.